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Científicos estadounidenses de la Universidad de Wake Forest están trabajando en una nueva bombilla altamente eficiente fabricada en plástico.
Está basada en la tecnología FIPEL (Field-induced Polymere electroluminiscent bulbs) y está compuesto por diferentes capas de un polímero emisor electroluminiscente mezclado con una pequeña cantidad de nanomateriales que brillan al paso de una corriente eléctrica para crear luz blanca y brillante perfectamente similar a la luz del Sol.
Según explican sus creadores, sus principales ventajas serían:
- Altamente eficaces. Según explican, dos veces más eficiente que las lámparas fluorescentes compactas (CFL), lo que las sitúa a la par de los LEDs.
- No parpadean ni emiten el zumbido característico de las fluorescentes clásicas.
- No queman ni desprenden calor.
- No tienen partes frágiles que se puedan romper si se caen al suelo o si las golpeamos.
- Emiten luz blanca y suave, sin el brillo amarillento de los tubos o la coloración azulada de los LEDs.
Además, las FIPEL´s son de larga duración, baratas de fabricar y gracias a su composición moldeable, es posible darle formas tubulares (como los actuales fluorescentes), planas (por ejemplo un panel de grandes dimensiones para colocar en paredes o techos), curvas, etc.
Casi sin precios orientativos ni datos técnicos aun (ya que los únicos datos disponibles hasta el momento son los proporcionados por sus propios creadores), como la luminosidad que esta tecnología ofrecerá o su IRC (Índice de Reproducción Cromática), es pronto para valorar si es mejor o peor que el resto de tecnologías existentes, por lo que sería precipitado poder predecir que esta tecnología aun en desarrollo, pudiera tratar de competir y sustituir a una tan eficiente como la tecnología LED.
