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Ferroli se ha propuesto aumentar la capacidad productiva de sus instalaciones industriales situadas en Burgos e impulsar la innovación. Para ello invertirá 4 millones de euros en este 2020, garantizando así un salto de calidad tanto en sus instalaciones como en sus productos.
Impulsar la innovación
Alrededor de 3 millones de euros estarán destinados a la modernización de las instalaciones de fabricación de radiadores de aluminio. En concreto, se invertirá en el montaje de tres nuevas islas de inyección de última tecnología, valoradas en un millón de euros cada una. Una de estas islas de inyección que sustituirán a las antiguas ya se encuentra en pleno proceso de construcción.
De este modo, la marca conseguirá pasar de 10 a 11 millones de elementos durante el año 2020. Estas máquinas tienen un ciclo más eficiente, menor gasto energético y filtran mejor los humos procedentes de la fusión del aluminio.
Dos nuevos radiadores eléctricos
Con el objetivo de impulsar la innovación, para el área de I+D, departamento de apoyo fundamental de la matriz italiana, se destinará un millón de euros. Esta inversión permitirá lanzar al mercado dos nuevos radiadores eléctricos.
- El primero de ellos es un radiador en malla con conexión eléctrica que permitirá conectar hasta 32 radiadores (separados por 40 m el uno del otro) con un solo dispositivo de control (centralita). Será ideal para grandes instalaciones como fábricas y hoteles.
- El segundo proyecto es el denominado radiador seco, cuya principal ventaja es la ausencia de aceite térmico que permitirá evitar posibles fugas. Ambas novedades son de diseño y fabricación 100% nacionales.
A pesar de la crisis provocada por la alerta sanitaria del COVID-19, Ferroli se muestra optimista. La marca, que está decidida a impulsar la innovación, espera recuperar parte del mercado no alcanzado en estos meses anteriores entre julio y diciembre de este año 2020.
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