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papel clave sate eficiencia energetica

Primero aislar, luego climatizar: el papel clave del SATE en la eficiencia energética

30/06/2025

Antes de instalar bombas de calor, es clave reducir la demanda energética actuando sobre la envolvente térmica. El aislamiento exterior (SATE) mejora confort, eficiencia y sostenibilidad, y permite aprovechar al máximo estos sistemas. Un enfoque integral asegura una climatización eficiente y alineada con los objetivos climáticos.

Aislamiento térmico de la envolvente

Antes de implementar soluciones tecnológicas avanzadas de climatización como bombas de calor, es esencial intervenir en la envolvente del edificio (fachadas, cubiertas, ventanas y suelos) para reducir las pérdidas de calor y frío. Esta medida pasiva permite:

  • Mantener una temperatura interior confortable con menor consumo energético.
  • Disminuir la potencia requerida para climatización.
  • Evitar el sobredimensionamiento de los equipos, reduciendo tanto la inversión inicial como los costes operativos.

Un buen aislamiento térmico también mejora el confort térmico y acústico, y alarga la vida útil del edificio.

Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior (SATE)

El SATE es una técnica eficiente y duradera que consiste en aplicar aislamiento térmico por la cara exterior de los cerramientos. Sus ventajas específicas incluyen:

  • Eliminar puentes térmicos de forma eficaz.
  • Permitir la rehabilitación energética sin reducir superficie útil interior.
  • Adaptar los edificios existentes para operar con sistemas de calefacción de baja temperatura, como suelos radiantes o radiadores de baja temperatura.
  • Mejorar la estética de la fachada y aumentar el valor del inmueble.

Maximización del rendimiento de las bombas de calor

Las bombas de calor (aerotérmicas o geotérmicas) son sistemas altamente eficientes que extraen calor o frío del aire, agua o tierra. Su rendimiento, expresado como COP (Coeficiente de Rendimiento), es mayor cuanto menor es la diferencia entre la temperatura de entrada y la de impulsión (sistema de distribución de calor). Por tanto:

  • Funcionan mejor en edificios bien aislados.
  • Con sistemas de calefacción a baja temperatura (30–45 °C), alcanzan su máxima eficiencia.
  • Son clave para la electrificación de la climatización y la reducción de emisiones de CO₂.

Necesidad de un enfoque global

No basta con intervenir por separado en elementos del edificio. Para lograr una descarbonización efectiva y rentable, es necesario un enfoque sistémico que considere:

  • Aislamiento térmico eficaz: reduce la demanda.
  • Sistemas de calefacción de baja temperatura: adaptados a la nueva demanda.
  • Generación renovable in situ: como paneles solares fotovoltaicos o térmicos, que reducen la dependencia energética externa y aportan energía limpia.
  • Sistemas de gestión energética y respuesta flexible a la demanda: tecnologías como domótica, almacenamiento energético o participación en redes inteligentes (smart grids) permiten adaptar el consumo a los momentos de mayor producción renovable o menor coste eléctrico.

Transición hacia la neutralidad climática

Esta combinación de medidas permite:

  • Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero del sector de la edificación, que representa una parte importante del consumo energético global.
  • Cumplir con las directivas europeas sobre eficiencia energética de edificios (EPBD), Renovation Wave y objetivos climáticos del Pacto Verde Europeo.
  • Alcanzar la neutralidad climática de manera escalonada, asequible y técnicamente viable, tanto en obra nueva como en rehabilitación.

Conclusión

La preparación para bajas temperaturas y la integración de bombas de calor en los edificios requiere un enfoque integral que comience por la reducción de la demanda energética mediante un aislamiento térmico eficaz. Medidas como el uso de Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior (SATE) permiten rehabilitar energéticamente los edificios sin comprometer el espacio interior, mejorando a la vez su eficiencia y valor.

El sistema SATE no solo mejora el confort y reduce los costes energéticos, sino que contribuye a la descarbonización, alineándose con los objetivos climáticos europeos y facilitando una transición técnicamente viable hacia la neutralidad climática.

Sobre ANFAPA

Creada en 1987, es la Asociación de Fabricantes de Morteros y SATE Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior y representa al 90 % de los fabricantes de morteros de albañilería, morteros técnicos y sistemas de aislamiento térmico por el exterior SATE.

Actualmente, ANFAPA cuenta con 44 empresas miembros y 26 patrocinadores, que aportan innovación y colaboración para promover la calidad de los morteros y los sistemas SATE, así como para desarrollar nuevos proyectos y representar los intereses del sector ante instituciones. Con esta unión, ANFAPA alcanza un volumen de negocio de casi 1.430 millones de euros, 384 almacenes, cerca de 100 fábricas y 4.400 empleados, consolidándose como un referente en el sector de la construcción y ofreciendo oportunidades para nuevas empresas.

ANFAPA actúa como representante único de los intereses de sus Asociados ante las distintas administraciones públicas e instituciones privadas, promueve la calidad de los morteros y de los sistemas de aislamiento térmico por el exterior, así como la promoción y desarrollo de sus productos, proyectos y sistemas defendiendo las buenas prácticas dentro del sector y potenciando un observatorio de calidad del producto. Junto a ellos, la neutralidad climática, la economía circular, la innovación, la digitalización y las nuevas tecnologías son los principales retos que prevé afrontar ANFAPA en los próximos años.

Para más información:

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