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Wolf recuerda que instalar sistemas de ventilación ayuda al ahorro y reduce la huella ambiental del edificio. Un dato importante teniendo en cuenta que los sistemas de climatización, calefacción y agua caliente sanitaria (ACS) son los responsables del 50% del consumo en la vivienda. Para ganar en confort y reducir la demanda de energía, se tiene que valorar su sustitución por equipos de última generación.
Rehabilitación integral
Desde la Administración pública, tanto europea como local, se trabaja de manera decidida en la renovación del parque edificado, facilitando el acceso a los fondos Next Generation a través de los diferentes programas de ayudas económicas e impulsando normativas que contribuyan a lograr los objetivos de descarbonización y bienestar previstos.
“Sin embargo, en los hogares todavía existen dudas a la hora de abordar una rehabilitación integral. Los altos costes de los materiales y las incomodidades que conllevan las obras, retrasan la toma de decisión que, en ocasiones, se limitan a cambiar algunos elementos de la vivienda –ventanas, puertas, etc.– aparcando una intervención más global y ventajosa, donde se renueven el sistema de calefacción o se incorporen sistemas de ventilación más eficientes”, explica Iván Agudiez, responsable de Proyectos de Ventilación Bussines Unit Heating de Wolf y experto en Passivhaus.
Confort, salud y ahorro
Wolf, como empresa especializada en la creación de espacios sostenibles, seguros y más eficientes, recuerda que este tipo de inversiones proporcionan innegables ventajas desde el punto de vista del confort y la salud, pero también del ahorro de energía, siendo la renovación de los equipos una inversión que se recupera en un plazo corto medio de tiempo. Por ejemplo, una vivienda de 150 m2 en una zona climática cálida, donde se instale un sistema de ventilación mecánica (VMC,) puede llegar a pagar cerca de 200€/mes en calefacción y cerca de 80 €/mes en refrigeración, recuperando la inversión realizada en un plazo de 7,2 años.
«Cuando intervenimos de manera global en un edificio, actuando sobre la envolvente y mejorando las instalaciones, no solo logramos importantes ahorros de energía, también se incrementa el confort y la salud de los usuarios y se reduce el impacto sobre el medio ambiente. En el caso de emplear sistemas de ventilación no solo se contribuye a evitar problemas de humedades y moho, sino que también se mejora la calidad del aire interior gracias a la incorporación de filtros que nos permiten obtener un ambiente más limpio, libre de partículas dañinas», apunta Agudiez de Wolf.
Soluciones WOLF
Desde la compañía también señalan que para conseguir el efecto (y ahorro) deseado tan importante es contar con profesionales cualificados y conocedores del sector, como el realizar un estudio pormenorizado del tipo de actuación que se puede realizar, adaptando el sistema instalado a las características del inmueble. En el mercado podemos encontrar multitud de soluciones que se ajusten a las necesidades de cada edificio o vivienda particular. Sin embargo, desde hace un tiempo lo más demandado es el sistema único, que combina varias soluciones que se integran a la perfección (ACS, calefacción, refrigeración y ventilación) y que se gestionan a través de un mando de control.
«Siempre que se pueda realizar una renovación integral -envolvente e instalaciones– deberíamos optar por ella, pero si no es posible, podemos abordar soluciones a menor escala, como la instalación de soluciones de ventilación DF descentralizadas. Lo importante es mejorar el confort y la eficiencia en el hogar, creando espacios más sostenibles y habitables», concluye el responsable de Proyectos de Ventilación Bussines Unit Heating de Wolf.
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